Arquitectura, empatía y comunidad: Superkilen

Superkilen (2012) es una plaza lineal de aproximadamente 33.000m2 y 800m de longitud ubicada en el barrio de Nørrebro dentro de la ciudad de Copenhague y desarrollada por BIG Architects (Dinamarca), Superflex (Dinamarca) y Topotek1(Alemania).
Superkilen: una plaza lineal que celebra la diversidad cultural
Encomendada por la Municipalidad de Copenhague la plaza simboliza la diversidad cultural. Es parte de un plan de renovación urbana del barrio junto con dos emprendimientos más, otra plaza (Mimersparken) y un centro de deportes (Nørrebrohallen) ubicado sobre Superkilen en lo que fue en su momento un taller de ferrocarriles. Dentro del plan de revitalización urbana el desarrollo de Superkilen busca reforzar el sentido de comunidad perdido por la inseguridad, debido a zonas peligrosas por constantes enfrentamientos en el pasado. A lo largo de las tres zonas se pueden encontrar elementos y vegetación que pertenecen a diferentes culturas y al menos 60 nacionalidades diferentes.

El contexto y los desafíos del barrio de Nørrebro
Las personas que generalmente residen en el barrio de Nørrebro son de clase baja, principalmente inmigrantes y personas que migraban del campo a la ciudad. Según las estadísticas de la Municipalidad, hacia el año 2011 los inmigrantes representaban un 27.6% de la población. La densidad poblacional del barrio (19.5 hab/m2) superaba por casi un triple a la población media de la ciudad. Durante 150 años el barrio fue lugar de constantes enfrentamientos a causa del racismo y diferentes choques culturales que se desarrollaron hasta el año 2008.

Inseguridad y conflictos en la historia de Nørrebro
El barrio tiene fama de ser agresivo; como es de clase baja, la tendencia es a la infelicidad y a la agresión. Sin embargo, y si bien la agresión se considera un aspecto negativo, en el momento en que está dentro del ring –dentro de un marco– se transforma en algo cultural.
(Martin Rein-Cano en Revista PLOT, 2014)
Un proyecto impulsado por la participación ciudadana y la colaboración interdisciplinaria
El proyecto surge como resultado de un concurso lanzado por la municipalidad de Copenhague junto con una asociación filantrópica privada llamada Realdania con el fin de revitalizar el barrio y promover nuevas formas de diseño arquitectónico junto con nuevas experiencias para la comunidad que utiliza el espacio público. En un primer lugar el emplazamiento intenta generar conectividad entre los barrios que rodean a Nørrebro generando un espacio acorde y seguro para peatones y ciclistas; en segundo lugar, las tres plazas proveen al barrio de numerosas actividades al aire libre permitiendo, además, generar eventos culturales y deportivos; y en un tercer lugar el proyecto contempla la diversidad cultural de los habitantes de modo de mostrar al resto de la ciudad la diversidad étnica existente en el barrio (BIG Architects, 2012).

Origen conflictivo
Nørrebro desde que empezó a crecer a partir del año 1852 es reconocido como un barrio conflictivo de modo que fue clave, previo al lanzamiento del concurso, el estudio de la cultura y la sociedad de Nørrebro por parte de la municipalidad. Antes de lanzar el concurso la municipalidad y Realdania realizaron encuestas sobre el tipo de espacio público que las personas de Nørrebro necesitaban, así como el tipo de actividades que eran útiles para las diferentes culturas existentes en la zona.
“La gente para la que es el parque, en este caso extranjeros pobres y que en su mayoría no hablan danés, se quedan fuera de la discusión” (Martin Rein-Cano en Revista PLOT, 2014), pero aun así se ideo la forma de incluirlas en el proceso de diseño.
Este proceso de integración de la comunidad previo al lanzamiento del proyecto permitió aumentar la sensación y el nivel de seguridad que se obtuvo luego de realizado el proyecto. A su vez, logró integrar tanto social como culturalmente a la comunidad permitiendo combatir la inestabilidad que se había generado a lo largo de la historia del barrio.
La importancia de la integración comunitaria en el diseño del espacio público
Un punto fuerte de la plaza es el fuerte trabajo de participación ciudadana previo y durante la concepción de la plaza. Durante el proceso de diseño se desarrollaron diferentes tipos de encuestas y actividades para determinar el tipo de mobiliario que debía ser utilizado en la plaza, así como enfocarse en las actividades que la plaza iba a albergar, de forma que se concibiera como un espacio adecuado a las necesidades de la comunidad. Este proceso de integración permitió que la comunidad se sintiera parte del espacio, de este modo el usuario se siente parte del espacio y en consecuencia lo tiende a cuidar y respetar.
Vergara y De las Rivas (2004, pág. 291) hacen referencia al desequilibrio que genera la globalización y los problemas que surgen en relación con la integración de la comunidad, así como en la inseguridad. Martín Rein-Cano (2014) en la entrevista de PLOT hace referencia a que cuando un inmigrante llega a otro lugar inmediatamente se transforma en una persona nueva al adquirir ciertas características del nuevo lugar, pero sin dejar de lado a su identidad original.
El proceso de diseño y la inclusión de diferentes culturas
Para el equipo ganador del concurso fue fundamental la participación ciudadana durante el proceso de diseño del espacio público, ya que fue una forma de acercamiento con los inmigrantes del barrio y una forma de integrar a la comunidad yuxtaponiendo las diferentes identidades a las que se refiere Rein-Cano. Es mediante los objetos que se encuentran en la plaza que se hacen participes los ciudadanos. El grupo concursante generó una plataforma donde todas las personas podían acercar sus propuestas.

Kristine Samson y José Abásolo (2013) profesores de la Universidad de Dinamarca y Talca, respectivamente, plantean en “The Trace of Superusers” que los inmigrantes traen consigo rastros diferentes a la globalización que buscan las grandes ciudades. Frente a estos “las huellas de la cultura inmigrante reensamblan espacios urbanos a través de signos heterogéneos, hábitos, simbología, economía y comercios informales” (Samson & Abásolo, 2013, párr. 3). A su vez coinciden con Lynch al expresar que los diferentes rasgos (haciendo referencia a las huellas de las diferentes culturas) brindan al barrio una identidad que los hace únicos.
“El diseño de Superkilen representa una visión de la sociedad donde la (…) interacción social entre los ciudadanos equivale a una sociedad saludable y no jerárquica”
(Samson & Abásolo, 2013, párr. 18).
La plaza lineal busca integrar a la comunidad. Nørrebro es ante todo un barrio con una alta tasa de inmigrantes y que originalmente contenía a la clase social más crítica. Superkilen tiene una alta carga simbólica para demostrar unidad y sentido de comunidad frente a las diferentes variables que la rodean. A su vez, la plaza se encausa con los lineamientos que plantea la ciudad para conseguir una alta calidad de vida, y así promover un desarrollo económico suficientemente estable para sustentar a la comunidad que rodea a Superkilen.
Los elementos simbólicos y funcionales de Superkilen
La diversidad cultural de la plaza se yuxtapone con una serie de objetos que son utilizados tanto para generar actividades para las diferentes edades como para contraponer culturas y etnias diferentes; es común en Superkilen encontrar una composición de carteles que hagan referencia a la cultura rusa junto con carteles que hagan referencia a la cultura coreana con un grafiti americano de fondo. Tanto a nivel gráfico como a nivel de actividades la variedad de cultura siempre denota ser el origen para cada aspecto de la plaza.
La diversidad cultural representada en objetos y vegetación
A nivel general la plaza contaba con un 60% de superficie impermeable, de modo que se resolvió por proyecto agregar área permeable y vegetación a lo largo del barrio, esta nueva vegetación que se agrega al barrio representa a las diferentes nacionalidades debido a la variedad y los orígenes de los árboles, de este modo se busca por proyecto unificar aún más la plaza al barrio.
Las tres zonas de la plaza
El proyecto nace como respuesta a la historia que posee el barrio de Nørrebro, el fin de este es revitalizar el barrio construyendo una plaza lineal que genere un impacto y buena conectividad en el barrio así promover un espacio público de gran calidad. Las tres zonas existentes en la plaza vienen a representar casi literalmente las tres zonas más problemáticas del barrio, bajo el pensamiento de Martin Rein-Cano, evidenciar un problema es mejor que mantenerlo oculto, de forma que buscan mediante el desarrollo del espacio público exponer los problemas que tiene la sociedad para apaciguarlos, como es el caso de la zona llamada The Black Market donde previo al emplazamiento era una zona donde mayormente se vendía droga y los lugareños la denominaban con el mismo nombre.

El emplazamiento se compone de tres diferentes zonas que se ven representadas físicamente con un color que se relaciona con su nombre: The Green Park (verde), The Black Market (negro) y The Red Square (rojo). Cada zona está destinada a un uso diferente, a su vez, cada zona posee una carga simbólica diferente. La plaza plantea fuertes quiebres a lo largo de las tres zonas, ya sea por diferentes tipos de colores que cambian abruptamente, como diferentes materialidades o por su topografía (original del terreno). Estos quiebres en cierta forma pueden simbolizar las rupturas que se generaron en diferentes épocas dentro de esta zona con la existencia de un elemento que las unifica.
Superkilen como un catalizador para la revitalización y la conectividad del barrio
La inversión del gobierno de casi nueve millones de dólares junto con un presupuesto de casi un millón de dólares en mantenimiento pone en evidencia cuán importante es para la Municipalidad de Copenhague el desarrollo de espacios públicos de calidad diseñado para las personas.
La relación de Superkilen con la movilidad y la accesibilidad en Copenhague
Superkilen no solo se plantea como un espacio público destinado al ocio, deporte o reuniones al aire libre, sino que también oficia de estructurador y conecta al barrio tanto internamente como con los barrios circundantes. De esta forma el proyecto garantiza la conectividad tanto a nivel de bicicleta como de peatón dentro del barrio y con la grilla existente que comienza a generar la ciudad a partir de los años 60 con Strøget. A su vez, Superkilen se afilia al concepto de tener un espacio de esparcimiento a menos de 15 minutos de cada vivienda de modo de aumentar la calidad de vida de cada barrio y por ende enfocarse en lograr una ciudad más vivible.
Teniendo en cuenta las dos principales características del barrio (diversidad y enfrentamientos) es evidente la transformación que Superkilen plantea para el barrio de Nørrebro.

Referencias
Extracto de: Hacia una ciudad vivible Un análisis del desarrollo urbano de Copenhague – Universidad ORT Uruguay